Mis queridos «glamcooks»:
El otro día probé en un restaurante muy mono una crema de pisto que me inspiró. En esta casa adoramos el pisto, así es que darle una vuelta de tuerca creativa a esta receta taaaan sana y deliciosa me pareció una excelente idea. Hoy he hecho el intento por primera vez, y os aseguro que esta receta pasa directamente a nuestro repertorio gastronómico habitual. ¿Queréis aprender a hacerla? Pues empezamos.
Crema de pisto (con huevo de codorniz)
Vais a necesitar:
- Frase : Si os gusta el pisto, no dejéis de probar esta receta de crema de pisto que es tan solo una interpretación moderna de este plato tan sano y delicioso.
Ingredientes
- Berenjena - 1
- Calabacín - 1
- Cebolla - 1
- Pimiento rojo - 1
- Pimiento verde - 1
- Tomate natural pelado (de los pequeños) - 2 ó 3
- Aceite, sal y pimienta
- Para servir
- Huevos de codorniz
Instrucciones
Lo primero que vamos a hacer es preparar las verduras para el pisto (si tenéis una receta de pisto infalible, haced ésa y pasad al paso del caldo para convertirla en crema). Para ello, limpiamos y pelamos el pimiento rojo, el verde, la cebolla, el calabacín y la berenjena (sin pelar ninguno de estos dos). Partimos también el tomate (yo los he comprado en lata, y como son pequeños, he añadido dos o tres y el caldito de la lata):
Ponemos aceite en una sartén, y pochamos las verduras a fuego medio. Salpimentamos bien:
Una vez que estén bien pochaditas, añadid el caldo para darle al pisto la consistencia de crema. Yo he añadido caldo de pollo en lugar de caldo de verduras, porque creo que le da un poco más de sabor, pero podéis añadir el caldo de lo que queráis. Para que tengáis la medida, debe cubrir las verduras, porque luego evapora un poco. Una vez añadido, debe cocinarse a fuego medio unos 15 ó 20 minutos:
Pasado el tiempo, ya podéis triturarlo. Ojo, en este paso, probadlo y rectificadlo de sal. A mi me ha quedado un poco fuerte ácido por haber utilizado tomate natural y no salsa de tomate, por lo que le he añadido media cucharadita de azúcar para compensarlo (podéis añadir también sacarina, stevia o el edulcorante que queráis si estáis a dieta y queréis hacerlo más ligero).
Si os ha quedado muy espesa la crema, podéis hacerla más líquida añadiendo un poco más de caldo.
Y ahora solo nos quedaría servirla. Para darle un toque más glam a nuestra crema de pisto, yo la he servido en copitas de Martini y le he añadido un huevo de codorniz por encima. Pero si sois vegetarianos, ¡os ahorráis ese paso y lo decoráis como más os guste!
Y..., ¡voilá! ¿Qué os parece? Os recomiendo de corazón probarla porque es sana, muy fácil de hacer, deliciosa y sorprenderá a todos.
Y con esto, mis queridos "glamcooks", me despido hasta el domingo que viene, no sin antes desearos una semana tan deliciosa como esta receta.
Un besote,
Cocotte.
Deja una respuesta