Mis queridos «glamcooks»:
La receta de hoy, aunque no es que digamos sea muy Minute, es uno de esos descubrimientos que os aconsejo probar porque quizás sea una de las recetas más ricas que he probado recientemente. Se trata de unas alitas de pollo casi caramelizadas (por la miel) con un toque asiático (que le da el jengibre y la soja). Desde que la probamos la primera vez (yo casi no pude probarlas, porque mis hijos se comieron el kg entero en un pis pas), quería compartirlas con vosotros, así es que, aquí tenéis la receta. ¿Queréis ver cómo se hacen? Pues empezamos.
Alitas de pollo al estilo asiático (con miel, ajo, soja y jengibre)
Vais a necesitar:
- Frase : Esta deliciosa receta de alitas de pollo con toque asiático os convertirá en los reyes de cualquier cena diaria o incluso de cualquier fiesta! Plato estrella Cocotte Minute.
Ingredientes
- Alitas de pollo - 1 kg.
- Salsa de soja - 70 g.
- Miel - 70 g.
- Aceite de oliva - 30 g.
- Zumo de limón - 50 g.
- Jengibre fresco - 1/2 cucharada
- Pimienta negra molida - al gusto
- Ajo fresco - 4 dientes
- Para decorar
- Cebollino fresco picado
Instrucciones
Lo primero que vamos a hacer es preparar el aliño para macerar las alitas de pollo. Para ello, vamos a pelar y picar los ajos, y hacer lo mismo con el jengibre (que le dará el toque asiático). Lo podéis hacer con el accesorio picador de la batidora:
Añadimos ahora el zumo de limón, la soja y la miel y removemos bien:
Incorporamos ahora el aceite y la pimienta y removemos bien:
Cortamos ahora cualquier parte sobrante de la piel de las alitas y las ponemos en una fuente y añadimos el aliño:
Lo tapamos y lo dejamos reposar con el aliño al menos dos horas (a poder ser toda la noche):
Pasadas las horas, ponéis las alitas en una cacerola y lo cocináis a fuego medio, sin quitarle el ojo y removiendo de vez en cuando, hasta que las alitas estén caramelizadas y hechas:
Una vez hechas, las pasáis a una fuente y les dais un golpe de horno a fuego medio/fuerte (grill) hasta que se doren y tenga un aspecto crujiente:
Y..., ¡voilá! Aquí las tenéis. Ricas, ¿no? Pues esperad a probarlas. Yo ya hago siempre 2 kg, de golpe, porque de verdad que desaparecen de la fuente en un abrir y cerrar de ojos. Las decoráis con un poco de cebollino fresco por encima, y ¡voilá!, éste es el resultado...
Y con este plato me despido de todos vosotros, mis queridos "glamcooks", no sin antes desearos una semana taaaan exótica y deliciosa como esta receta.
Un besote,
Cocotte.
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