Vais a necesitar (para 6 chupitos):

Mirad. yo he utilizado esta mermelada que me ha regalado mi amiga Gloria y que es una delicia, porque tiene los arándanos ¡casi enteros! Pero podéis utilizar la que más os guste:

Y he utilizado estos tarritos que son ideales para este postre, ya que los podéis cerrar y así es más fácil conservarlos. Los podéis comprar en MAKRO, se les puede dar mil usos y son reutilizables:

Pues empezamos. Lo primero que vamos a hacer es pesar el azúcar y calentarlo con los 100 ml de nata:

Añadimos ahora la esencia de vainilla, y removemos de nuevo bien:

Mientras se integra todo, hidratamos la gelatina. La gelatina es muy fácil de utilizar. Tan solo tenéis que hidratar las hojas en un recipiente con agua hasta que estén totalmente reblandecidas (tardan un par de minutos). Una vez reblandecidas, las escurrís y las integráis hasta que se disuelvan en la mezcla que queráis gelificar. Mirad, así:

Una vez integrada y disuelta la gelatina en la mezcla de la nata, el azúcar y la esencia de vainilla, añadimos el queso crema y removemos bien:

Una vez incorporado el queso e integrado bien, lo retiramos del fuego y lo reservamos.

Vamos a hacer ahora la base de las galletas. Para ello, vamos a triturar 4 ó 5 galletas con el accesorio triturador de la batidora:

Colocamos ahora un par de cucharadas de mantequilla en un bol apto para microondas, y la derretimos:

Mezclamos ahora la mantequilla derretida con las galleta trituradas, removiendo bien para que se impregnen todas:

Colocamos ahora un par de cucharaditas de esta mezcla en la base de cada uno de los tarritos. Yo lo he hecho con una cucharita, y luego lo he aplastado un poco con este accesorio, pero si no lo tenéis, intentad aplastarlo bien con una cucharita. Si el medio os queda un poco más alto, no os preocupéis, pero intentad que los bordes estén a la misma altura, ya que es una parte que se va a ver:

Vamos ahora a rellenar los tarritos con la mezcla de queso. Yo he utilizado un embudito, pero lo podéis hacer con cuidado con una cucharita o con un biberón de los de salsas:

Una vez rellenos todos, los refrigeramos al menos durante 4 horas antes de servirlos:

Pasado el tiempo, los sacamos de la nevera y los coronamos con un par de cucharaditas de mermelada de arándanos:

Y..., ¡voilá! ¡Va por todos vosotros!

Espero que os guste y que os animéis a hacerlos. Es un postre ideal para una cena de picoteo, y lo bueno es que lo podéis hacer con bastante antelación (aguantan al menos 3 ó 4 días en el frigo). Si no los queréis hacer en chupitos, la receta sirve igual para hacer una tarta pequeña.

El estilismo es el siguiente: los tarritos son de MAKRO, y las bandejas de mi adorada Sandra Marques...

Y con esto me despido hasta la semana que viene, no sin antes daros de nuevo las gracias y desearos una semana tan dulce como esta receta.

Un besote,

Cocotte.