Mis queridos «glamcooks»:
Hoy es un día alegre a la vez que un poco triste para Cocotte. Ésta semana es la última semana que veréis el blog con este aspecto. A partir de la semana que viene CocotteMinute cambia de cara, pero no de espíritu, ya que su alma de glamcooking permanecerá intacta. Hay que renovarse o morir, y esta plantilla, que no permite que se vea bien desde tableta o Smartphone debe evolucionar. Llevamos meses trabajando en su nuevo aspecto, que coincide además con que el blog pasará a estar dentro de los blogs de la revista Woman, una revista que personalmente ha significado mucho para mí y que llevo dentro de mi corazón. Todo su equipo, encabezado por su maravillosa directora, Mayka Sánchez, son unos estupendos profesionales y mejores personas, ¿se puede pedir más? Será un auténtico lujo compartir tantas cosas con vosotros.  Aun así, al enfrentarme a la receta de hoy he sentido un poco de nostalgia de los principios de este humilde blog que nació con la intención de compartir con todos vosotros mi pasión por hacer felices a los que me rodean a través de la cocina. Si he conseguido trasmitiros en estos tres años un poco de esa filosofía, mi esfuerzo habrá merecido la pena. CocotteMinute siguirá con las mismas ganas de compartir recetas, estampas gastronómicas y cariño culinario con todos vosotros. Podréis acceder como lo habéis hecho hasta ahora, ya que lo único que cambia es su aspecto. Espero de corazón que os guste, ya que el cambio ha sido pensando en haceros más fácil y visual navegar por CocotteMinute.

Y tras esta introducción, pasamos a la receta, ¿os parece? La de hoy resume a la perfección lo que es una receta «cocotte» y «minute» ya que son unos bocaditos de lasaña facilísimos y que podéis perfectamente servir como entrante, como aperitivo en una fiestita o como una cena de diario para vuestros peques. Adoro la lasaña, pero necesito bastante tiempo para hacerla. Ésta es una estupenda manera de tener sabor a lasaña en 15 minutos.

Bocaditos de lasaña

By rosalia 15 marzo, 2015

Bocaditos de lasaña. ¿Queréis aprender a hacerla? Pues empezamos.

Ingredientes

• Obleas de empanadilla
• Salsa boloñesa - pueden restos que tengáis de haber hecho casera (la mejor de las opciones) o un paquetito de salsa fresca. Yo he comprado ésta de Mercadona en al zona de pasta fresca refrigerada , y para mi sorpresa, funciona fenomenal en esta receta. Eso sí, un paquete os da para 8 bocaditos.
• Queso ricota
• Bechamel - yo la he comprado hecha porque este finde iba fatal de tiempo, pero la podéis hacer casera.
• Queso para fundir

Instrucciones

Vais a necesitar:

Para esta receta vais a necesitar moldes de muffin, ya sea una bandeja, como he hecho yo, o moldes individuales. Si es así, lo mejor es que sean duros, es decir, o de silicona o los de papel de aluminio, pero no los hagáis sobre los de papel porque se os rompería. Una vez que los tengáis, untáis los moldes de mantequilla para que la masa de empanadilla no se os pegue:

Una vez untados, metéis con cuidado de que no se os rompan (las obleas son más delicadas de lo que parecen) una oblea en cada hueco, intentando que queden centradas. Con el tiempo he descubierto que las obleas de empanadilla ¡tienen muchísimos usos además de para hacer empanadillas! os recomiendo que no os perdáis esta otra receta de "empanadillas glam":

A continuación, ponemos una cucharadita de queso ricota en el centro de cada una de ellas:

Ahora, una cucharadita de salsa boloñesa sobre la ricota:

Coronamos con un poco de salsa bechamel y cubrimos con queso emmental o mozzarella para fundir:

Los metemos al horno previamente calentado a 170º hasta que estén dorados. Poned la fuente en la bandeja del medio del horno para evitar que se os queme la masa de empanadillas.

Y los sacáis cuando veáis que ya están hechos, más o menos así:

Y..., ¡voilá! ¿Qué os parecen? Acompañados de una buena ensaladita de canónigos o con lo que queráis resultan un entrante o una cenita de diario para los niños deliciosa.

El estilismo es el siguiente: el mantelito es de CASA, y los cuenquitos, la bola de rosas y la cuchara los compré en Alemania.

Espero que os haya gustado la receta y que os animéis a hacerla. De verdad, os llevará poquísimo tiempo y es de lo más lucida. Si es así, ya me contaréis qué tal.

Y yo sin más me despido hasta la semana que viene, en la que como os he dicho antes, estrenamos aspecto, ¡qué nervios, por Dios! Espero que os guste tanto como a mí.

Un besote muy fuerte,

Cocotte.

Print