Mis queridos «glamcooks»:
¡Cocotte se ha puesto a dieta! Y es que no he parado desde Navidad… Y aunque la dieta consiste en cerrar un poco el pico y en comer sano (vamos, nada del otro mundo), he comenzado a darles un toque glam a las recetas de dieta de siempre, para no sufrir tanto… Y la de hoy es un buen ejemplo: vamos a darle un toque glam al pescado al vapor, con sabores de Tailandia: cilantro, lima, guindilla y sésamo. ¿Queréis ver cómo? Pues empezamos… Y os digo una cosa, ha salido tan rico, que es una receta light que ya seguiré haciéndo en el recetario de cenas diarias aún cuando ya no esté a dieta.
Pescado al vapor al estilo thai (receta light)
Vais a necesitar:
- Frase : O cómo darle un toque glam a una receta de dieta y convertirla en un plato de lo más exótico
Ingredientes
- Pescado blanco (panga, merluza, lenguado, etc.). Puede ser congelado. - 1 por persona
- Tirabeques (o judías verdes) - 1 puñadito
- Guindilla roja fresca - 1
- Lima - 1 chorrito de su zumo
- Cilantro - 1 ramillete
- Aceite de sésamo - 7/8 gotas
- Sésamo o ajonjolí - Al gusto
- Sal y pimienta
Instrucciones
Para esta receta light he utilizado un aparatejo que he descubierto hace poco y que sinceramente utilizo muchísimo. Se trata de un estuche para cocinar al vapor en el microondas, de la marca Lékué. Conserva todas las propiedades de los alimentos y los cocina de manera rapidísima, en torno a 4 minutos en el micro. Es tan fácil de usar y el resultado es tan rico (incluidos los colores de la verdura), que lo cierto es que la amortizas en seguida. Yo la compré en una tienda y me costó bastante más cara (casi el doble), pero la he encontrado en Amazon por 16 euros y pico. Mirad, es ésta. Importante, si queréis haceros con una, compradla con la bandejita blanca de dentro, la que aparece en la segunda foto, ya que es la bandeja que sujeta a los alimentos dentro del estuche. Os lo digo porque la venden con y sin bandejita.
Lo primero que vamos a hacer es preparar la guindilla. Para eso, vamos a quitarle las semillas y las membranas de dentro que es lo que le otorgan ese sabor picante. Si se las quitáis, no tendrán ningún picor, siempre y cuando sean frescas. Una vez quitadas las semillas y las membranas, las cortáis en tiritas. Darán, además de sabor, un toque de color a esta receta light:
Colocamos el pescado sobre la bandejita blanca, y añadimos encima las tiritas de guindilla:
Añadimos a continuación los tirabeques o las judías verdes. Mirad, en realidad, éstas que yo he utilizado no son tirabeques aunque se le parecen. Son una verdura entre judías y guisantes que se llaman "sugar snap peas". Son dulces y deliciosos, pero si no las encontráis, podéis utilizar tirabeques, judías verdes redondas o planas o incluso ramilletes de brócoli:
Añadimos ahora las gotitas de aceite de sésamo y el sésamo. Ojo, el aceite de sésamo no es de dieta, y además, da mucho sabor, por lo que hay que poner tan solo 7/8 gotitas. Si no tenéis, lo podéis sustituir perfectamente por soja, no hay ningún problema. Saldrá igual de rico.
Y por último, salpimentamos:
Añadimos ahora un par de cucharadas soperas de agua al estuche, por debajo de la bandejita blanca, intentando no mojar el pescado ni el resto de los ingredientes. El agua se pone dentro del estuche para que los ingredientes se puedan hacer al vapor. Por eso os comentaba lo de que es más interesante comprar el estuche con bandejita, para que entre otras cosas, no se os mojen los ingredientes. Una vez añadido el agua, cerramos el estuche y lo metemos al microondas a potencia máxima (en mi caso 800 w.) durante 4 minutos:
Pasado el tiempo, podéis sacar el estuche del micro. Ojo, puede quemar, así es que os recomiendo sacarlo con manoplas. Una vez sacado, debéis dejarlo reposar al menos un minuto, y ¡cuidado al abrir el estuche!, porque el vapor que salga os puede quemar un poco:
Lo emplatamos, y completamos el plato con unas hojitas de cilantro y con un chorrito de zumo de lima:
Y..., ¡voilá! ¿Qué os parece? De restaurante, ¿verdad? Parece mentira que sea una receta light, pues el sabor no lo es en absoluto. Siempre os digo que en el cocotteo la creatividad es una de las claves, y en momentos como en los de una dieta, mucho más todavía, porque cuidarse y disfrutar no están reñidos.
Y con esto me despido hasta la semana que viene, no sin antes desearos una semana tan ligera como esta receta.
Un besote,
Cocotte.
Deja una respuesta