Lo primero que vamos a hacer es precalentar el horno a 180º. Una vez hecho, empezamos con la receta. Desenrollamos la masa de la pizza sobre una bandeja de horno:

Estiramos la masa de la pizza

La cubrís bien por todos los lados con la nata fresca y salpimentáis bien:

La cubrimos con la crema fresca (nata espesa)

Salpimentamos bien

Peláis ahora la cebolla y la partís en rodajitas muy finas. Si tenéis una mandolina, hacedlo con ella. Si no, con un cuchillo, pero intentad que las rodajas de cebolla sean finas para que se hagan mejor:

Pelamos la cebolla y la partimos en rodajitas muy finas

Si tenéis una mandolina, hacedlo con ella

Poned ahora la cebolla sobre la masa de pizza con la nata, y encima, el bacon (partidlo un poco con unas tijeras, porque los trozos a veces son enormes):

Poned la cebolla sobre la masa con la nata

Añadid ahora el bacon (cortadlo un poquito para que los trozos no sean tan grandes)

Cubridla bien por todos los lados

Metéis ahora la pizza en el horno y la dejáis que se haga hasta que esté la base dura y la superficie dorada:

Metedla en el horno a 180º hasta que esté hecha y dorada

Pasado el tiempo, ya estaría:

Pasado el tiempo, la sacáis del horno

Y..., ¡voilá! ¿Qué os parece? Pues esperad a probarla. En casa os van a hacer la ola. Mis hijos se comen casi una entera cada uno, pero lo normal sería media y acompañada con ensañada verde bien aliñada.

Flammkuchen (pizza alsaciana con nata y bacon)

Y con este flammkuchen (o pizza alsaciana con bacon y nata), adaptada al modo Cocotte, me despido de todos vosotros no sin antes desearos una semana tan deliciosa como esta receta.

Un besote,

Cocotte.