Lo primero que vamos a hacer es escurrir las setas y cortarlas, ya que, al menos las de esta marca, vienen cortadas un poco grandes:

Escurrimos las setas

Las cortamos

Cortamos ahora una cebolla en trocitos, y la doramos en una sartén:

Partimos cebolla en trocitos pequeños

Ponemos aceite a calentar en una sartén

La doramos en la sartén

Una vez dorada, añadimos las setas y las rehogamos bien hasta que pierdan todo su líquido. Las salpimentamos:

Añadimos las setas y las rehogamos bien hasta que pierdan todo el líquido

Salpimentamos

Añadimos ahora un chorrito de brandy y dejamos que se evapore todo el alcohol:

Añadimos un chorrito de brandy y dejamos evaporara el alcohol

Salpimentamos ahora los medallones de solomillo por los dos lados y los doramos por los dos lados también en una sartén:

Salpimentamos los medallones de solomillo

Los doramos por los dos lados en juna sartén

Los doramos por los dos lados en una sartén

Los dejamos templar un poco.

Extendemos ahora las obleas de empanadillas. Ojo, hay dos tamaños. Yo he cogido sin querer el pequeño, por eso he puesto medio medallón en cada uno, pero si cogéis el grande, podéis poner el medallón entero. Una vez extendidas, ponéis un trozo de solomillo en cada oblea. Encima, una cucharada de la mezcla de setas y cebolla, y sobre ella, cerráis el paquetito con otra oblea sellando muy bien los bordes para que no se abra:

Estiramos las obleas de empanadilla

Colocamos un trozo de solomillo en cada oblea

Ponemos una cucharada de mezcla de seas sobre cada trozo

Y un poco de queso

Ponemos otra oblea encima y lo sellamos bien por los lados

Hacemos lo mismo con todos

Pintáis cada paquetito con huevo batido y los metéis al honro, previamente calentado a 180º hasta que estén dorados. Una vez pasado el tiempo, los sacáis:

Los pintamos con huevo batido

Y los metemos al horno

Y los metemos la horno a 180º hasta que estén hechos

Una vez dorados, los sacáis del horno

Y..., ¡voilá! ¿Qué os parecen? Pues no sabéis lo deliciosos que resultan. Además, es una receta que podéis hacer con múltiples rellenos (solomillo con queso de cabra y cebolla caramelizada, por ejemplo!). ¡Dejad volar vuestra imaginación!

Solomillos Wellington individuales (fáciles)

Y con esta receta me despido de todos vosotros, mis queridos "glamcooks", no sin antes desearos un año cargado de salud, y de todas las cosas que os hagan felices, y sobre todo, cargado de ingrediente secreto: amor, muuuucho amor.

Un abrazo muy fuerte y hasta el año que viene.

Cocotte.